Como ya llevaba mucho tiempo sin uno, ya tenía yo mono de congreso. Y este, nada más y nada menos, que de lo mío. La fauna del máster llevamos todo el día en la muy ilustr villa de Avilés (que, a Dios gracias, he conocido por fín más que en fotografía) aprendiendo lo que un francés, un inglés y un español (sí, como en los chistes) tienen que decir sobre lo que hacían los avilesinos hace un puñado de años. Eso, y por supuesto gastar el tiempo entre ponencia y ponencia pasando del café al vino y del vino al pote y cachopo con los mismos eruditos que en teoría nos dan clase y nos examinan a final de curso. Cosas de la vida humanista. Todo eso, además de comprobar el fervor que siente el británico (vil opresor) por los caldos de esta tierra y la cecina que nos han puesto.
Y, para terminar tan gastrocultural velada, una cena familiar con los primeros blogueros que pasan por la corte, la de las fotos y un señor de bigote, precisamente en La Corte. Más cosas de la vida.
Ya os contaré mañana qué estamos aprendiendo por la "vetusta villa de Abillés".
mmmmm...cecina.
ResponderEliminarUn cachopo es lo bueno que viene a estas horas, cuando unos ya esta cansado de tanto estudiar. Estaria encantado de llevarme uno de esos apetitosos cachopos a la boca en estos momentos.
ResponderEliminar¡Seguro que asi aprubo el examen de filosfia! Con el estomago lleno se piensa mejor.
Pero ¿tu que eres, historiador o Pantagruel "pofesional"?Y otra cosa, que los opresores serán opresores,¡pero no tontos!Yo tampoco rechazaría un buen cachopo y un estupendastico plato de cecina...
ResponderEliminarViendo lo que el medievalista cuenta y especialmente después de un plato de spaghetti (esta vez sin tomate, por variar algo), con una ensalada verde, siento que me he equivocado de profesión.
ResponderEliminarVoy a ver si me hago "historiador forestal", que seguro que me irá mejor. De todas formas, lo que estoy deseando es llegar a casa.
Esta claro que una de las partes mss interesantes de la historia es el conocimiento de las costumbres de los pobladores de una región y hay que ver que región, que población y que costumbres tienen por esos lugares. Y luego dicen los detractores de las humanidades que ¡la Historia no sirve para nada!, son únicamente fechas y batallas.
ResponderEliminarEstá claro que lo triunfa por aquí son las referencias "gastroculturales"...
ResponderEliminarY luego nos quejamos de que los de fuera recurren siempre al "¿De Asturias? Allí sí que se come bien. Tomé yo unas fabes con almejas una vez..."
Observo que de todas las costumbres del medievalista que pulula por la Corte del Rey Casto la gastronómica es la que atrae a numerosos seguidores???
ResponderEliminarAyer me di un paseo por la Corte y observé,con nuevos conocimientos,que en el "Parque"(siempre El Campo)está,efectivamente el arco de S.Isidoro(siempre del Convento de S.Francisco)creo que es por eso por lo que desplazaron a S.Francisco de sitio.El besín del día